lunes, 24 de septiembre de 2012

Mtra. Carmen E. Acosta Betancourt

      Hoy Dios me concede poder escribir en nuestro boletín no desde la columna de La lengua y los hablantes pero sí en una especie de Editorial, para externar la satisfacción que me embarga poder servir, en un espacio diferente, a mi querida Prepa Ibero Veracruz. Quiero comentarles que con la partida del Mtro. Rodrigo León Labastida, a quien deseamos lo mejor en la nueva etapa de su vida, tengo la oportunidad de atender la Dirección de esta escuela, lo cual me compromete aún más con los alumnos, con sus familias, con mis compañeros de trabajo, con mi entorno social.
      Hemos iniciado teniendo presente que actuamos como si todo dependiera de nosotros, aunque confiamos como si todo dependiera de Dios, ¡Qué grandeza apoyarnos en el Señor, quien nos dirige y nos envía!
      Espero que el diálogo permanente sea nuestra estrategia para que el compartir sea desde el respeto y valoración de lo distinto, ojalá podamos compartir lo que somos y tenemos, nuestra preocupación por la humanidad, nuestras alegrías y tristezas, que en la unión de los ánimos, nos hace comunidad apoyándonos mutuamente en el amor cristiano.
      Bienvenidos estudiantes a este cruce de caminos que ustedes sabrán matizar con los mejores colores de su espontaneidad y de su madurez en proceso.
      Bienvenidas familias de nuestros alumnos, respaldo de nuestra comunidad, agentes de apoyo y puntales de la Compañía.
      Bienvenidos compañeros, suministradores de educación, tecnología, humanismo y valores, bienvenidos a un modelo diferente, sí diferente, por sus objetivos y pedagogía, por buscar la transformación de la persona y la integración de todas sus dimensiones, por la pretensión de formar a los mejores alumnos y alumnas para el mundo.
      En lo sucesivo estaremos en contacto con este espacio para informarnos de lo que acontece en nuestro sistema Ibero, que en realidad no se queda sólo en Puebla, Tlaxcala y Veracruz, sino que trasciende a lo universal, a lo global. Mi invitación, para que a partir de hoy usemos este medio como testimonio de lo que nos acontece en el interior y en el exterior, en el mundo de las ideas y en la práctica, en la experiencia y en la convivencia. ¡Mis mejores deseos en este comienzo!

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